Titulo
original: Esquilache
(Basada en la obra teatral de Antonio Buero Vallejo Un
soñador para el pueblo)
Año:
1989
Duración:
100
min
País:
España
Director:
Josefina Molina
Reparto:
Fernando
Fernán Gómez como Esquilache
Ángela
Molina como Fernanda, dama de Esquilache
José
Luis López Vázquez como el secretario personal de Esquilache
Adolfo
Marsillach como Carlos III
Amparo
Rivelles como Isabel de Farnesio
Concha
Velasco como la mujer de Esquilache
Ángel
de Andrés como el Marqués de la Ensenada
Tito
Valverde como rebelde durante el motín
Premios:
fue nominada con 10 candidaturas a los premios Goya de en su cuarta
edición, entre esas candidaturas la de mejor película. Sin embargo
obtendría dos goyas; al de mejor dirección artística y el de mejor
actor de reparto para Adolfo Marsillach como Carlos III.
Género:
Histórico
Sínopsis
La
película desarrollada durante el reinado de Carlos III. Da a conocer
los sucesos ocurridos entre los días 23 y 26 de Marzo de 1766 y que
han sido conocidos como el motín de Esquilache.
La
película comienza con una pequeña introducción a la dinámica del
gobierno de Carlos III, el cual era un reformador ilustrado. La
última de las medidas tomada por su ministro Leopoldo Esquilache de
cambiar la indumentaria española, produjo el motín, ya que a esta
se sumaba otras muchas medidas impopulares y a una crisis de
carestía.
Se
narra la película a modo de carta, la cual ha sido escrita por
Carlos III a Esquilache, poco antes de morir y está siendo leída a
este en su lecho de muerte (aunque esta circunstancia se resuelve en
la parte final). En las primeras escenas el marqués de Esquilache
llegará a su casa destrozada por el pueblo y emprenderá en una
carroza el camino hacia el Palacio Real, donde lo ha llamado el rey.
De camino va rememorando todos los sucesos ocurridos en los días
previos y que le han llevado a estar en esa situación. A la llegada
al Palacio Real se irán produciendo los acontecimientos para su
destitución y deportación.
Psicología
de los Personajes / Historia real- Historia ficticia.
Los
dos personajes principales y más carismáticos serían Esquilache y
Carlos III. Este tema ha sido bien tratado por la película en el
aspecto de su relación, ya que la historiografía también plasma la
estrecha relación entre el rey y su ministro. Esta estrecha relación
vino marcada por la misma dirección en el gobierno de ambos, de
carácter reformador y de tradición ilustrada. Carlos III vio la
necesidad de confiar en un hombre cuyos objetivos fueran parecidos a
los suyos y cuya carrera en la política no estuviera marcada por el
carácter nobiliario de la época.
Mientras
que a Carlos III se le muestra como un hombre convencido con sus
ideas pero en la linea del despotismo ilustrado, el personaje de
Esquilache ha sido mucho más humanizado, aunque recalca que se deben
imponer las ideas ilustradas con la típica frase “todo para el
pueblo pero sin el pueblo”, se siente culpable de los
acontecimientos y la pérdida de vida humana. Se le presenta como un
idealista que ha trabajado por el bien común y busca la “mayoría
de edad” para el pueblo, que este sepa reconocer el buen camino.
En
cuanto a la nobleza esta está representada por el Marqués de la
Ensenada. En un principio este se acerca a Esquilache para pedirle el
favor del rey debido a su estrecha relación, pero bien es cierto que
se convertirá en uno de los instigadores del motín.
La
nobleza estará en contra del ministro por su acercamiento al rey,
por su nuevo titulo y por una serie de medidas que chocan con la
vieja nobleza. Esquilache no se dará cuenta de la influencia de
Ensenada hasta el final, cuando el rey le manda darle la carta de su
destierro por traición, al ser uno de los nobles influyentes y
agitadores del pueblo.
La
esposa del Marqués de Esquilache también está encarnando el
espíritu nobiliario. En desavenencias con su marido busca el lujo,
la posición social, y coloca a sus hijos dentro de cargos
importantes, los cuales Esquilache pedirá al rey que revoque al
representar una incongruencia con su oposición a la vieja nobleza.
Por otro lado la posición monarquica tradicional está representada en Isabel de Farnesio, la madre de Carlos III.
Otro
de los agentes importantes en la película es el pueblo. Este por un
lado toma un carácter agresivo encarnado en los amotinados, por otro
un carácter sumiso e inocente, representado por la dama de
Esquilache, Fernanda, a la cual el ministro le dice “el pueblo no
son los que están ahí fuera, el pueblo es gente como tú” con
esto se intenta dar una visión realista de los hechos, pero al mismo
tiempo humanizar también al pueblo.
En
cuanto a las peticiones de los amotinados, algunas de ellas
introducidas por los nobles podemos encontrar;
- El cambio de vestuario es la causa más visible. La medida fue tomada para impedir el bandidaje ya que la antigua vestimenta de basaba el el sombrero de alas y la capa larga, se cambia el vestuario a la capa corta con la que se impide tapas el rostro y el sombrero de tres picos, con el cual se deja la cara al descubierto. Sin embargo el cambio de vestimenta es tomado por el pueblo como un atentado a la patria, al espíritu y la identidad españolas. Esto ha sido tratado por la historiografía como una medida eurpeizante en el marco de la adhesión del España a las medidas reformadoras de la ilustración.
- La idea de cantidades de productos y dinero que Esquilache está desviando a Italia, debido a su origen Italiano. Aquí vemos la negación del pueblo a la entrada en el gobierno de extranjeros como lo eran el marqués de Esquilache, Grimaldi y Sabatini. Se pedía por parte del pueblo la salida de Esquilache y toda su familia de España.
- Disolución de la guardia Valona
- Reducción del precio de los productos básicos. Esta fue la verdadera causa del pueblo, debido al aumento del precio del pan y las crisis de subsistencia que dieron lugar a que el apoyo de la nobleza fuera incorporando otras peticiones.
Valoración
personal;
Se
ejemplifica en la película sobre todo un marcado odio a Esquilache
por parte del pueblo y la nobleza. Sin embargo y en contraposición
con la historiografía no se deja claro el verdadero motivo del
levantamiento del pueblo, las crisis de subsistencia. Se atiende por
otro lado más a la oposición nobiliaria y el reflejo de estas en el
pueblo amotinado.
Aunque
no se ha dejado de lado los sucesos violentos durante el motín,
estos son demasiado suaves, excepto en un par de escenas. Y aunque no
se puso en entredicho el poder real, tampoco se plasma la huida del
rey hacia Aranjuez y el miedo de este a que el motín fuera en contra
de su persona. Si no que se ha centrado el problema en la figura del
Marqués de Esquilache. Por otro lado tampoco se tratan los abusos de
la guardia, esta solo sale atacando a la población en las últimas
escenas cuando el motín llega a su punto más álgido.
Tanto
la figura del rey Carlos III, como la de Esquilache han sido
ensalzadas dentro de la ilustración, sin hacer verdadero incapié en
el tipo de reformismo ilustrado, el despotismo. Se les considera idealista y minoría.
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